Ciertos alimentos pueden ser más convenientes que otros en ayunas, según el
fin que se persiga o las circunstancias vitales individuales
Imagen: bertholf |
Muchas veces oímos o leemos
afirmaciones como las siguientes: "tómese un zumo de naranja en
ayunas", "beba agua con limón en ayunas", "coma una
cucharada de polen en ayunas", "ingiera una cucharada de aceite antes
de desayunar".
Son sentencias -en ocasiones, muy
enfáticas- que aseguran que hay un alimento preciso que debemos consumir antes
que otros.
Pero, ¿esto es así? ¿Hay en realidad
un mejor alimento para romper el ayuno? ¿Se encuentra alguna diferencia entre
empezar por el aceite y seguir con el zumo o hacerlo al revés? Y más todavía:
¿hay algún alimento con el que no debemos comenzar el día? A lo largo de estas
líneas se responde a estas preguntas y se explica qué conviene tomar en
ayunas y por qué.
Qué tomar en ayunas y por qué
Por la mañana, tras permanecer
unas 10 horas (o más) sin ingerir ningún alimento desde la cena anterior, se
suceden diversos cambios metabólicos para asegurar la supervivencia.
Uno de los más destacados y
evidentes es la hipoglucemia, por lo que el organismo está dispuesto a absorber
con más avidez aquello que se le ofrezca.
Hay alimentos que pueden ser más
convenientes que otros, según el fin que se persiga o las circunstancias
vitales individuales.
Estos son algunos ejemplos:
·
Agua con zumo de
limón exprimido.
Puede ser un complemento
dietético interesante para alcalinizar el medio.
La dieta occidental,
caracterizada por un exceso de proteína animal, alimentos azucarados, café y
alcohol, conduce a la acidificación del organismo.